No hace tanto tiempo cuando la banca aplicaba, con mano de hierro, una política restrictiva de financiación a las empresas algunos contables, empujados por la necesidad de renovar las líneas de financiación, se vieron “obligados” a dar una imagen del balance con una mayor estabilidad financiera que la que necesitaban tiempos atrás. Para ello utilizaban, la llamada “Contabilidad Creativa”, es decir, se resaltaban las bondades y se ocultaban los defectos del negocio.
Desde un punto de vista contable, existen varios movimientos aceptados por la normativa vigente, que da a la empresa la posibilidad de enaltecer las sinergias positivas de los negocios como. Esta afirmación queda reflejada en los siguientes ejemplos:
1. Mejora de la liquidez de la empresa mediante movimientos de cuentas contables que son menos realizables a otras de mayor liquidez. Por ejemplo, los préstamos concedidos a empresas del grupo deben ser de vencimiento menor a un año.
2. Alteración del beneficio mediante la disminución de los porcentajes contables. La variación de la vida útil del inmovilizado resultará de una variación de la amortización, con un resultado mayor o menor en la cuenta de explotación de la mercantil. Estos cambios de porcentajes son aceptados incluso en la Dirección General de Tributos, sin embargo los cambios de tipo de sistema de amortización.
3. Variación en los fondos propios a través de la modificación en las partidas de deudas. Así, si existe una deuda con un socio o un tercero, podemos realizar una ampliación de capital para dotar de mayor solvencia al balance, recordad que los fondos propios son partidas no exigibles e incrementan el valor de la empresa.
No hemos de olvidar que la utilización de estas prácticas no nos exime de la obligación ética y moral de ejecutar una contabilidad ajustada a la normativa y legalidad vigente.
Si necesitas ampliar esta información puedes llamar a Asesoria La Costera al teléfono 962283278.